Las impresoras 3D son una de las grandes novedades de este siglo que evolucionan y revolucionan la forma como los objetos pueden ser construidos. A pesar de ser una tecnología impresionante, una de las desventajas de las actuales impresoras 3D, es que “imprimir” un objeto es un proceso demorado, que en el mejor de los casos puede demorar hasta varias horas.
Sin embargo, esto podría estar por cambiar pronto, gracias a un nuevo método de impresión con luz en 3D que están desarrollando un grupo de Investigadores de la Escuela Politécnica Federal de Lausana de Suiza (EPFL), el cual en lugar de imprimir los objetos capa por capa como lo hacen las impresoras 3D tradiciones, imprime el objeto en su totalidad, y en cuestión de unos pocos segundos.
La técnica de EPFL utiliza imágenes tomográficas creadas con escáners médicos para obtener un modelo digital en 3D del objeto a imprimir. El proceso de impresión hace girar un fluido plástico en bruto dentro de un contenedor mientras se pasan láseres desde todas las direcciones y lo endurece en la forma correcta casi instantáneamente.
Esta tecnología puede llegar a imprimir objetos con una enorme precisión de hasta 80 micrómetros, lo cual promete una tremenda resolución, que deja a las actuales impresoras 3D en vergüenza. Sin embargo, en su estado actual, esta tecnología tiene una tremenda desventaja, y es que solo es capaz de imprimir objetos de un tamaño máximo de 2 centímetros.
Aunque se trata todavía de un prototipo, promete un avance tremendo en la tecnología de impresión 3D, la cual podría hacer real algún día, el sueño de imprimir un objeto en cuestión de segundos.
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