A poco más de un año de su lanzamiento, el sistema de reconocimiento facial Face ID visto por primera vez en el iPhone X de Apple sigue siendo el más robusto del mercado, y eso ha quedado nuevamente comprobado con el experimento realizado por Thomas Brewster, un reportero de Forbes especializado en privacidad y ciberseguridad quien utilizó una réplica de rostro impreso en 3D y varios smartphones para ver cuál de ellos podría ser burlado por la máscara.
El mecanismo utilizado para tratar de burlar el sistema de reconocimiento facial de los distintos dispositivos fue un modelo digital del rostro de Brewster impreso en 3D utilizando un sofisticado método de escaneo compuesto por 50 cámaras dispuestas en distintos ángulos y una impresora de polvo de yeso capaz de generar una réplica bastante realista del rostro del reportero, el cual luego fue retocado incluso con pintura.
Los teléfonos seleccionados para esta prueba fueron el iPhone X de Apple, el OnePlus 6, los Galaxy Note 8 y Galaxy S9 de Samsung y el LG G7 ThinQ, los cuales cuentan todos con sus propias implementaciones de sistema de reconocimiento facial, en algunos casos incluso con dos versiones del mismo sistema, ofreciendo un reconocimiento ligero rápido (pero menos seguro), y uno avanzado, pero más demorado.
Face ID el único que no se dejó engañar
Comenzando por el teléfono más vulnerable, podemos ver en el video como Brewster logra desbloquear sin problemas el OnePlus 6 en todos los intentos y sin importar las condiciones de luz. Pasando a los dos terminales de Samsung, el Note 8 y el S9, ambos cuentan con dos versiones de desbloqueo facial, siendo el ligero fácilmente burlarle por la máscara 3D, pero requiriendo jugar un poco con la luz y los ángulos, para lograr el mismo efecto con la versión más robusta del sistema de reconocimiento facial, que al final también terminó cediendo.
En la parte final vemos como el LG G7 ThinQ ha sido el terminal de Android que más se ha resistido a ser burlado por la el rostro impreso en 3D, logrando ser desbloqueado solo una pocas veces y tras jugar mucho con la luz y los ángulos.
Finalmente, el iPhone X ha sido el único equipo que no se ha dejado engañar por la máscara, impidiendo en todo momento desbloquearse con la réplica de Brewster. La razón de que esto ocurra es que, a diferencia de sus competidores, el sistema de Apple utiliza cuatro sensores para leer el rostro de una persona. El mecanismo llamado TrueDepth se compone de la cámara frontal de 7MP, una cámara de infrarrojos, un proyector de puntos y un iluminador infrarrojo. A pesar de ello, en muchos casos se ha demostrado que el face ID falla al momento de diferenciar dos personas muy similares, como lo son gemelos o incluso en algunos casos a padres e hijos.
En su momento, Apple logró justificar la existencia del notch y la desaparición del Touch ID, gracias a la gran precisión del Face ID, el cual según ellos estaba por lo menos dos años adelantado a la competencia. No obstante, todo parece indicar que los competidores no están tan interesados (de momento) en seguirle el ritmo a Apple, y se están decantando por nuevas propuestas como lo son los lectores de huellas dactilares ultrasónicos debajo de la pantalla, los cuales permitirán entregar teléfonos realmente todo pantalla a partir del próximo año.
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