Impulse K1

La privacidad es una de las preocupaciones mas importantes para la mayoría de los usuarios de dispositivos móviles por estos días. De allí que tengamos medios de autenticación biométricos para acceder a nuestros dispositivos, como las huellas dactilares, el reconocimiento facial, y algunos más sencillos como los patrones, pines y contraseñas.

Sin embargo, el Impulse K1, es un teléfono que ha querido llevar las cosas a otro nivel, al usar literalmente una llave física de encriptación, que se deben acoplar al mismo para poder desbloquearlo. Este no es un teléfono común, sino que ha sido diseñado para un mercado muy particular de usuarios, que ponen la seguridad de sus datos por encima de todo lo demás.

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Y cuando decimos por encima de todo lo demás, es porque el Impulse K1, no es un teléfono llamativo en absoluto para el usuario tradicional. Estamos hablando de un teléfono con unas especificaciones muy regulares, como las de un gama media, un diseño bastante desactualizado, he incluso una versión modificada de sistema operativo, pero con un precio premium bastante alto que puede llegar hasta los $1.183 dólares.

Precio alto, especificaciones bajas

Para hacernos una mejor idea de lo que este gran precio incluye, tenemos una pantalla de 5.7” con resolución HD+, un procesador MTK6762 Octa core, una batería de 3.400mAh, y solo dos cámaras, una de solo 5MP al frente, y una de 13MP atrás. Esto es lo que podríamos encontrar fácilmente en los teléfonos de hace unos 3 o 4 años.

De acuerdo con el fabricante, el sistema operativo CryptoDATA OS, es compatible con apps tanto de Android como de iOS, pero deben ser instaladas solo bajo responsabilidad del usuario, pues ellos solo dan garantía sobre las apps que ya hubieran sido previamente certificadas por Impulse.

Obsesión con la seguridad

Donde el Impulse K1 realmente sobresale es en sus avanzados sistemas de seguridad que según el fabricante protegen la información del usuario a un nivel tan alto, que incluso tienen un reto con un premio de un millón de dólares, para el hacker que los logre burlar.

La llave física que tiene cada Impulse K1, es única, y se usa no solo para acceder al dispositivo, sino para desencriptar la información, la cual además también se encuentra almacenada en un sistema descentralizado en la nube que usa arquitectura blockchain para garantizar que no pueda ser robada desde un solo sitio.

Impulse K1

El único punto a tener en cuenta es que, en caso de perder la llave física, se pierde toda positividad de acceder al dispositivo, y como tal el acceso a toda la información, por lo cual como usuario perderías toda la inversión realizada.

¿te gustaría tener un teléfono así de seguro, o te parece que es demasiado?

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