New York está por convertirse en el segundo estado de USA en prohibir y penalizar la venta de cigarrillos electrónicos a menores de edad. La medida fue anunciada por el gobernador Andrew Cuomo, cullo gobierno ha publicado una acción ejecutiva de emergencia para detener el vaping entre los menores de edad.
BREAKING: Today I am announcing emergency executive action to ban the sale of flavored e-cigarettes.
-State Police and DOH to ramp up enforcement against retailers who sell to underage youth
-We will advance legislation to eliminate deceptive marketing of e-cigarettes to youth
— Andrew Cuomo (@NYGovCuomo) September 15, 2019
“Nueva York está enfrentando esta crisis de frente y hoy estamos dando otro paso de liderazgo en la nación para combatir una emergencia de salud pública” dijo el gobernador Cuomo en una rueda de prensa.
Estas acciones se producen a tan solo unos días de que Kevin Burns, el propio CEO de JUUL Labs, una de los fabricantes más importantes de cigarrillos electrónicos, dijera públicamente “No vapees No uses JUUL” como una medida para reconocer, que el producto no está direccionado a no fumadores, sino a personas que quieren dejar el hábito del cigarrillo.
La polémica declaración del CEO de JUUL se produjo como respuesta a una carta de advertencia emitida por la FDA a la compañía, por decirles a los estudiantes que sus productos de vapeo eran “totalmente seguros” y “99 por ciento más seguros que los cigarrillos“.
Los jóvenes han sido el blanco del vaping
Lamentablemente la realidad es que los no fumadores, y especialmente los jóvenes, han sido el blanco de las campañas publicitarias de los fabricantes de cigarrillos electrónicos, quienes irresponsablemente anuncian el vaping como una alternativa “saludable” al cigarrillo.
“Los fabricantes de cigarrillos electrónicos con sabor a frutas y dulces están apuntando intencional e imprudentemente a los jóvenes, y hoy estamos tomando medidas para ponerle fin a esto. Al mismo tiempo, tiendas inescrupulosas están vendiendo productos de vapeo a menores de edad a sabiendas. Estos minoristas ahora están advertidos de que estamos endureciendo las normas, y serán capturados y procesados”.
La Policía Estatal y el Departamento de Salud (DOH) se han unido para llevar a cabo investigaciones encubiertas en todo el estado. Cualquiera que se encuentre vendiendo tabaco y productos de vapeo a compradores menores de edad enfrentará sanciones penales y civiles.
Al igual que con la venta del alcohol, los establecimientos comerciales que venden cigarrillos electrónicos deben solicitar a los compradores su identificación, y verificar que sean mayores de edad para poderles vender. Igualmente, esta nueva regulación exige que las tiendas coloquen letreros explícitos que indiquen que el vaping y los cigarrillos electrónicos son perjudiciales para la salud.
USA lucha contra la adicción
Tan solo ayer estábamos hablando sobre la declaración de bancarrota de Purdue Pharma, la farmacéutica detrás del OxyContin, un potente opioide contra el dolor, que es altamente adictivo y ha sido marcado como uno de los mayores culpables de la crisis de los opioides en Estados Unidos, y hoy nos enteramos de que los gobiernos locales tienen otro enemigo en la mira, el vaping.
En junio, san Francisco se convirtió en la primera ciudad del país en prohibir la venta de cigarrillos electrónicos a menores de edad, posteriormente esta tendencia fue seguida por el estado de Michigan donde se detuvo la venta de productos de vapeo de nicotina con sabor en tiendas minoristas y en línea. Las restricciones se extendieron al marketing engañoso, que puede perpetuar las ideas de que los productos de vapeo son inofensivos.
.@SecAzar on President @realDonaldTrump‘s e-cigarette announcement: pic.twitter.com/HYp8l4KCUW
— The White House (@WhiteHouse) September 11, 2019
Próximamente estas restricciones podrían hacerse nacionales, luego que el presidente Trump anunciara sus planes para prohibir la venta de cigarrillos electrónicos saborizados y sin tabaco, los cuales se comercializan casi que específicamente a menores de edad como una forma de introducirlos en el hábito del vaping.
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